Guía de Ordenamiento Territorial en Espacios Rurales, de Karla Barrantes Chaves, es una obra que ofrece una aproximación clara, práctica y contextualizada al complejo tema del ordenamiento territorial, enfocándose específicamente en las particularidades de los espacios rurales. Escrita desde una perspectiva latinoamericana y con un enfoque interdisciplinario, esta guía se presenta como una herramienta útil tanto para técnicos, gestores y planificadores territoriales como para comunidades locales interesadas en participar activamente en la toma de decisiones que afectan su entorno.

Desde el comienzo, Barrantes Chaves deja en evidencia su preocupación por abordar el ordenamiento territorial no solo como un proceso técnico, sino como un instrumento político y social que debe responder a las necesidades reales de las poblaciones rurales. Lejos de ser un manual descontextualizado, el libro reconoce la diversidad de contextos rurales —desde comunidades campesinas hasta áreas periurbanas— y propone una planificación flexible, participativa y sostenible que respete los saberes locales y las dinámicas socioeconómicas propias de estos territorios.

Una de las fortalezas principales del texto es su accesibilidad. Aunque maneja conceptos técnicos relacionados con la geografía, la planificación rural y la gestión ambiental, lo hace con un lenguaje claro y didáctico que facilita su comprensión incluso para lectores sin formación previa en estas áreas. Además, el libro incluye esquemas, cuadros explicativos y ejemplos prácticos que ayudan a visualizar y aplicar los contenidos expuestos.

La estructura del libro sigue un orden lógico y progresivo: comienza con una introducción conceptual sobre qué es el ordenamiento territorial y sus fundamentos teóricos, continúa con herramientas metodológicas para su implementación en zonas rurales, y finaliza con orientaciones sobre cómo construir planes territoriales participativos, integrando a actores locales, instituciones y autoridades. Este enfoque gradual permite que el lector avance desde la comprensión básica del tema hasta la adquisición de habilidades concretas para su aplicación.

Otro punto destacable es el énfasis en la participación ciudadana como eje central del proceso de ordenamiento. La autora subraya la importancia de involucrar a las comunidades en la identificación de problemas, en la toma de decisiones y en la definición de estrategias de desarrollo local. Esta visión refuerza la idea de que el ordenamiento territorial no puede ser impuesto desde arriba, sino que debe construirse colectivamente, respetando la heterogeneidad cultural y productiva de los espacios rurales.

En conjunto, Guía de Ordenamiento Territorial en Espacios Rurales cumple sobradamente su propósito como texto introductorio y herramienta operativa. Es una obra que combina rigor técnico con sensibilidad social, y que resulta especialmente valiosa para quienes trabajan en el diseño e implementación de políticas públicas, así como para organizaciones comunitarias que buscan incidir en la planificación de su territorio. Por su claridad, su enfoque práctico y su compromiso con el desarrollo rural sostenible, este libro se erige como un referente indispensable en el campo de la gestión territorial contemporánea.